Ramadán 1439

Llamamiento a orar con amor Radical con que nos amó el Padre. (Fil. 2:8) 

Muchos de nosotros, como cristianos, hemos perdido de vista la visión de Dios acerca de la bendición para todas las familias de la tierra. Nos hemos dejado dominar por el miedo y, a veces, el prejuicio en lo que se refiere a los musulmanes. Para superar esto, debemos arrepentirnos de nuestros miedos y pedirle a Dios de nuevo fe, afirmando la misericordia de Dios hacia los pueblos de este mundo. Debemos arrepentirnos de nuestra apatía y pedirle a Dios esperanza, de Su esperanza para el mundo musulmán. Debemos arrepentirnos de nuestra falta de amor y pedirle a Dios de Su amor para que podamos participar en el reino multiétnico y multicultural de justicia que Jesús prometió (Mateo 6:10 y 2 de Pedro 3:13).

Pero, ¿cómo vamos a avanzar como creyentes? Si somos críticos 
del Islam y los musulmanes, debemos recordar que nosotros, como 
ellos, somos seres humanos. Hay posiblemente muchos aspectos de 
nuestra vida, valores, ideas y pensamientos que otros podrían criticar. La crítica a veces puede 
ser útil, pero también puede reflejar una falta de amor. Si estamos faltos de amor, tenemos que 
arrepentirnos.
Seamos honestos con Dios. Dios ama a las personas de todos los grupos étnicos y culturales. Y Él 
tiene la intención de que estén delante de su trono un día: “…porque tú fuiste inmolado, y con 
tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación;” (Apocalipsis 
5:9). Que Dios nos ayude a alinear nuestras actitudes con los valores de Dios. 
La luz persigue a la oscuridad. Un solo fósforo puede iluminar una habitación grande. Y si varias 
velas se encienden, una habitación entonces se torna aún más brillante. 
La oscuridad y la negrura no pueden prevalecer frente a la luz. Basta con encender un interruptor 
y una habitación puede inundarse con luz. ¿Estamos listos para mantener el interruptor de la 
luz encendido?
La fe puede remplazar el temor. Incluso, una fe pequeña puede mover montañas. Que la fe se 
levante en nuestros corazones. Dios puede cambiar al mundo musulmán, millones de personas 

todavía pueden llegar a conocer el perdón de los pecados. Y la vida nueva en Cristo. Créelo

Dios tenga misericordia de nosotros

, y nos bendiga; haga resplandecer su rostro sobre nosotros, para que sea conocido en la tierra tu camino, en todas las naciones tu salvación. Te alaben los pueblos, oh Dios; todos los pueblos te alaben. (Salmo 67:1-3)